7 de diciembre de 2010

LO LLAMAMOS AMOR


Fue una mañana en la que ella despertó con ganas de ser feliz, buscó mil maneras para alegrar cada momento del día, jugó con las trampas que esconde el destino y simplemente saltó hacia su propia aventura. Iba pasando los segundos, minutos, horas sin decir nada, ella sólo sintió que su instante había llegado. Al final de todo, encontró la perfecta razón de la felicidad anhelada.

Cuando llegó el momento de sonreír y responder a tan bella mirada, comprendió que la pureza no es sólo un término de dioses. Cuando acarició su mejilla después de una triste mañana ella entendió que el destino ya había decidido por ellos. Cuando besó su frente y con un gesto delicado dijo que todo iba a estar bien, ella entendió que la paz había llegado de forma cautelosa. Cuando esperó más de doscientos días para su regreso, ella entendió la importancia de la paciencia. Cuando con una voz suave escuchó sueños plasmado en palabras; ella decidió que era el momento perfecto para llamarlo amor.

1 comentario:

Clandestina dijo...

lindos textos.
te espero pr el mio
http://sitio-clandestino.blogspot.com